Ubicación
Getsemaní se ubica cerca del centro y pegado a la Ciudad Amurallada.
Lugares destacados del Barrio Getsemani
Debido a que el barrio Getsemaní es antiguo y bohemio, sus calles son angostas, como callejones o callejuelas. Cada calle tiene su propio nombre y característica singular.
A la Calle de la Media Luna, Gabriel García Márquez la llegó a describir como una calle tormentosa, pues se volvió una zona de tolerancia.
La Calle del Guerrero es conocida por la oferta de vida nocturna, bares y discotecas. Conecta directamente con la Plaza de la Santísima Trinidad, el epicentro de Getsemaní.
La Calle Larga es bastante recorrida porque aquí se encuentra la casa donde vivió el mulato Pedro Romero, protagonista de la Independencia y líder de los lanceros de Getsemaní.
La Calle del Arsenal es la zona rosa, de la rumba y de la música. Aquí las casas tienen balcones pintorescos, los cuales le dan un toque antiguo al ambiente. Además, esta arquitectura juega con las luces modernas de las discotecas.
La Calle de las Tortugas está encerrada por altos muros pintados y grafiteados, cubiertos de imágenes de palenqueras risueñas, retratando la cotidianidad del sector, con cuadros hechos por artistas locales.
La Calle del Pozo conduce a la plaza que lleva el mismo nombre. En el pasado, los habitantes del barrio hacían sus festividades a principio de año, con desfiles y carrozas alegóricas que transportaban a sus “diosas”.
La Calle de las Chancletas proviene de la naturaleza. Selváticos jardines y enredaderas brotan de las paredes de sus casas, combinados con la intensa luz del sol y los colores vivos de las fachadas.
La Calle de la Sierpe es la calle de los olores. Aquí hay un mosaico gastronómico nacional e internacional para todos los gustos. Comida árabe, italiana, caribeña, entre otras.
La Calle de San Juan está cargado de arte urbano. Hay casas multicolor donde viven los nativos.
Historia
Los callejones del barrio Getsemaní cuentan historias, narran sin necesidad de pronunciar palabras. Como por ejemplo la historia de Pedro Romero: un mulato cubano, que se encargó de liderar el movimiento independentista llamado “los lanceros de Getsemaní”. Este grupo fue la resistencia más brava de las batallas de independencia en la Cartagena del siglo XIX. Fue un artesano respetado, que organizó a la clase trabajadora, poblaciones enteras de oriundos que querían poner su firma con sangre en los libros de la historia colombiana.
Es por él que el 11 de noviembre se celebran las Fiestas de los Lanceros. Una importante tradición que recuerda el esfuerzo de estas personas del barrio: gente trabajadora y soñadora que dio su vida por su libertad.
Cuenta la leyenda que Pedro Romero provenía de Cuba, pero aún hoy son confusas las pruebas de su paso por Colombia. Incluso, todavía se duda de su existencia. Pero la casa donde se cree que vivió estaba ubicada en la Calle Larga.